Hoy he estado un ratin en un metro parado entre estaciones, un metro relativamente vacío. Lo típico es que la gente vaya leyendo, tecleando en sus móviles (como yo), escuchando música o simplemente mirando de arriba a abajo al que tiene enfrente. Pero en esta ocasión, había un bebé, más concretamente una bebita de unos 8-9 meses, morena, pelo negro a lo afro con diadema, vestida ideal de rojo y gris, fuera del carrito, en brazos de su mamá y parloteando y pegando botes encima de su madre.
En cuanto la pequeñaja ha empezado a parlotear con ruiditos y a botar, riendose con lo que su mami le contaba para entretenerla y que no llorara, la cara de la gente ha empezado a cambiar.
Hasta ese momento era gris, caras de cansancio, aburrimiento, estrés, preocupaciones y hambre….y un montón de cosas más…..que hacen que las miradas sean tristes y viejas, con arrugas y la luz del metro no ayuda a que esto mejore! Se veían tímidas sonrisas, asentimiento, esperanza, diversión, alegría…miradas de ternura en definitiva.
Cómo puede una cosa tan pequeñaja transmitir ese cambio en la gente?, son la chispa de la vida? Con un simple ruidito que emiten de pura emoción provocan una sonrisa, ni el mejor cómico del mundo! Y si lanzan una carcajada? Hace que le veas los empastes a la gente! Y cuando son un poco mas mayores que cantan, bailan y parlotean sin vergüenza, son para cascarse de risa!
A lo mejor es porque soy mami y estoy muy sensibilizada con este tema pero me parece sorprendente la ternura que desatan los niños en la gente, conocidos y desconocidos….. Y no entiendo que aún haya gente que diga que no le gustan los niños! No le gustarán los niños pesados, que los hay! Pero quién, desprovisto de sentimientos, no puede apreciar un momento como este!