Lo primero que he pensado cuando he entrado en el metro y he visto a esa señora poco agraciada y carente de armonía en aspecto, ha sido que se le había tenido que fundir la luz del baño cuando se ha ido a maquillar! Luego he pensado que no podía ser sólo un problema de luz, sino también de elección del tono de maquillaje, porque es que ese tono no creo que fuera suyo! Yo por muchas ganas que tengan de vender en una tienda, si tienes un tono de piel y te llevas el maquillaje para otro que no es ni parecido al tuyo, qué menos que decírtelo, no? Quizá no hizo caso….
El caso es que con un tono más que rosado, mal extendido -bueno sólo extendido a trozos- y unas sombras de ojos en exceso, mal dadas y también muy mal escogidas en un tono amarillo indescriptible, la combinación era lo más parecido a espeluznante! Se me ha pasado por la cabeza que volviera de un tratamiento facial tipo abrasión y por eso tuviera ese tono tan raro pero yo creo que era maquillaje!
Mientras afinaba la vista con discreción para mirar de reojillo y comprobar, me he dado cuenta de qué mi hija ha ido hoy disfrazada a la guardería de Caperucita Roja, por lo que lo mismo esta señora se había medio disfrazado aunque como la ropa parecía corriente, no puedo imaginar de qué! Quizá ese pelo raro y feo era una peluca!!!! Qué pena no haber podido averiguarlo!
Si te disfrazas, hay que hacerlo con todas las consecuencias, que se sepa a ciencia cierta de qué vas disfrazado o de lo contrario podrían pensar que se ten fundido las luces del baño y te has maquillado con el maquillaje de otro! FELIZ CARNAVAL!