Cuando nuestros peques están malos vamos al médico y nos manda medicinas, antibióticos y otras recomendaciones médicas que incluyen posologías que nuestros peques no quieren de manera habitual, que hay que engañarles para que se lo tomen, despertarles por la noche justo cuando han cogido buen sueño y que en muchas ocasiones no sólo les quitan la gana de comer sino también añaden otros síntomas o efectos secundarios que hacen que sean más difícil tratar con ellos.
Pero por qué no recetan un poco de cama de papà y mamá? Yo lo tengo comprobado, se quitan las toses, los dolores de tripa, las inquietudes… Se les pasa todo!
Que llevas tres horas levantándote a ponerles el chupete? o a darles agua para quitar o al menos suavizar la tos, que no respiran bien, que están inquietos hablando y no se duermen… da igual lo que les pase, al minuto de meterlos en la cama de papá y mamá, caen en el más profundo de sus sueños! Administra la cama algún tipo de somnífero? Pues no, pero algo tiene…. Lo hemos comprobado incluso sin que papá y mamá estén en la cama!!!! Es que la cama mola, simplemente!!!!
Eso sí es la receta para que los peques se duerman y los papis ya no peguen ojo! ideal para aquellos que se duermen apagando el despertador porque entre lo que se mueven y el ruido que hacen (no se sí es peor un chicle o el chupete en estos casos, al menos el chicle se lo tragarían…!). Si te descuidas te ponen un pie en la boca y el chupete te arranca las pestañas!
Aunque es una gran receta, como otras muchas medicinas crea adicción con serias contraindicaciones! Vamos, que el peque se te quiere instalar ahí como perenne y no hay quien de lo quite de encima. Deja de ser un pobrecito malito a ser un huésped malvado «chupa sangre» que te roba el sueño y el descanso!
Yo como estoy en momento de hospital de campaña, como casi todas la mamis que tengan a sus peques en el cole o guarde, pues estoy habituada a tener a ratos huéspedes en la cama… Y tú?